La creación de los Anunnaki

Hace mucho tiempo. Al principio de todos los ciclos de tiempo; existía solamente una Realidad, la Diosa. La Diosa en su infinita soledad, creo de la nada y de su pensamiento puro a una raza de seres semejantes a ella, los Reeds.

Los Reed son la primera de 5 razas, llamadas hiperbóreas. Los Reed tenían una cultura y lenguaje muy similar a lo que hoy conocemos como Japón. La Diosa quiso nacer dentro de la familia imperial de los Reed, cuyo país era llamado Clow en honor al primer Rey de ese lugar el Mago Clow Reed.

Los Reeds tenían todos los genes activados, las tres cadenas de ADN que contienen las razas hiperboreales. Los Reed tenían un aspecto humanoide, muy similar a los humanos que hay hoy en día, pero eran más delgados; de dos metros de estatura en promedio además con la piel algo pálida y con ligero toque entre azul y rosado. Se caracterizan porque como tienen todo el espectro de ADN también tiene los genes reptil pero sin llegar a tener la apariencia de reptiles. De hecho, como veremos más adelante; todas las razas hiperbóreas se caracterizan por tener la sangre reptil, es decir, son de la familia del dragón.

Los primeros gobernantes de Clow fueron Clow Reed, Yuuko y Fei Wong Reed.

La Diosa apareció en el mundo de Clow dándosele el titulo imperial de Princesa de Clow.

La creación de los Anunnaki

Los Reed eran unas pocas personas que compartían todo el ADN de la Diosa sin llegar a ser como la misma. Pero por eso mismo, no podían ser tantas personas, Así que para ir poblando el mundo de Clow la Diosa creo otros seres junto con Clow Reed. Ésta sería la segunda raza hiperbórea, llamada Anunnaki, cada nueva raza hiperbórea creada va acentuando los genes reptiles. Los Anunnaki al igual que los Reeds son metamórficos como todas las demás razas hiperbóreas. Los Anunnaki habitaban Clow junto con la élite Reeds sus creadores, por eso se les llamaba los Reed-Anunnaki.

En este primer mundo, se practicaba el honor, el Bushido o camino del guerrero y el budismo zen. Usamos esta terminología ya que es lo más cercano para poder entender, pero en sí mismo serian doctrinas con ligeras variaciones, en especial el culto a la Diosa. El culto a la Diosa no consistía en rituales o ceremonias, si no en actos de lealtad.

En este mundo se practicaban las sendas del zen, la meditación en movimiento como el Karate-do. También se practicaba el Shikan taza, que es el zazen hecho con conciencia cósmica y de todo corazón. Todas estas eran enseñanzas de la Diosa para su pueblo. Siempre se buscó la iluminación, el despertar de la conciencia y el dominio justo y correcto de los sentidos y emociones. De tal forma que las razas hiperbóreas se caracterizan por sus emociones más centradas y a veces hasta inexpresivos.